Espacio Multifuncional, Rehabilitación, La Habana, 2016.

 


Sobre los años 20, un arquitecto francés complacía todos los caprichos de una aristócrata cubana, al diseñar lo que hoy conocemos como el Museo de Artes Decorativas, pero que en ese entonces solo era una vivienda privada.

 


En uno de los laterales de este edificio, la fundación Copperbridge pidió que se le otorgara el espacio para realizar allí su nueva sede. El espacio asignado constaba de 3 áreas exteriores diferentes pero conectadas entre si. Rodeado de estatuas neoclásicas y vegetación “ordenada” se nos pedía un programa que encapsulara actividades como restaurant, galería, oficinas, etc.

 


Contrario a la idea preformulada del cliente, nuestra respuesta se basó en reforzar y reactivar lo que ya ocurría en el exterior, en vez de construir un nuevo objeto arquitectónico. El verdadero atractivo del lugar debería seguir siendo el jardín.

 


Concentramos el programa en una sala principal y un bar de 3.2m de ancho en el límite entre los 2 patios, amplificando las diferencias entre estos al anchar el muro que los separaba.
El programa restante lo localizamos amplificando al máximo el área de servicio existente que quedada escondida detrás de otro muro, dando espacio para otra sala estrecha y profunda y la cocina.

 

 

 

 

 

 


Esta nueva arquitectura jardín sirve de infraestructura al espacio verde exterior mientras se esconde dentro del paisaje.

 

 

 


Elaborado por Anadis González, Fernando Martirena, Gerardo Guillén y David Medina.